Cualquier estación del año es buena para visitar Bilbao. En los próximos meses podremos disfrutar de un buen número de festivos (12 de octubre, 1 de noviembre, 6 y 8 de diciembre) que invitan a visitar la capital vizcaína. Por eso, ¡escápate este otoño a Bilbao!
Visitando Bilbao en otoño
Bilbao combina el encanto de su pasado y de un presente que ha convertido a la capital vizcaína en un punto de interés turístico en todo el mundo.
Gracias, en gran parte, al atractivo del Museo Guggenheim, dedicado al arte contemporáneo y moderno, y que ya ha celebrado su primer cuarto de siglo de vida, tras ser inaugurado el 18 de octubre de 1997. Obra del arquitecto Frank O. Gehry, destaca por su cubierta compuesta de 35.000 láminas de titanio. Una pinacoteca que maravilla por dentro y por fuera.
Este museo (uno de los muchos con los que cuenta la Villa, como el Museo de Bellas Artes o el Museo Marítimo) es una de las señas de identidad del Bilbao más contemporáneo.
Un Bilbao que tampoco olvida sus raíces, ubicadas en su Casco Viejo (Siete Calles), el barrio más antiguo de la ciudad. Situado junto a la ría, acoge monumentos tan emblemáticos como la Catedral de Santiago o la Iglesia de San Antón, o enclaves tan afamados como La Plaza Nueva. Desde 1972 está reconocido como Monumento Histórico-Artístico. No se puede dejar de probar un ‘pintxo’ en cualquiera de sus bares.
Y si te quieres llevar algún producto típico de nuestra gastronomía, no olvides pasarte por el Mercado de la Ribera, reconocido en 1990 como el mercado municipal de abastos más completo por el Guinness. Podrás acercarte a más de 180 comercios en el que, gracias a sus más de 10.000 metros cuadrados, es el mayor mercado cubierto de Europa.
Otro de los elementos que hacen que Bilbao sea un destino ideal es que se trata de una ciudad perfectamente comunicada gracias a un gran número de medios de transporte (metro, tranvía, tren, autobús…), que además se puede recorrer a pie sin que conlleve mucho tiempo o esfuerzo.
Por eso, uno de los planes más recomendables para los que gustan de pasear, es subir hasta el monte Artxanda a pie (aunque también puede hacerse en funicular) y así, desde su mirador, que se encuentra a unos 300 metros de altitud, contemplar la capital vizcaína en toda su magnitud, tanto las iglesias y edificios tradicionales del casco antiguo como la Gran Vía, sin olvidar la Ría del Nervión.
Un momento rojiblanco
Pero una visita a Bilbao no resulta completa sin acercarse a San Mamés, un estadio en el que podrás sumergirte en AC Museoa, el Museo del Athletic Club, y de este modo conocer la historia del equipo rojiblanco. Una historia que suma 125 años y que está estrechamente ligada a La Catedral, estadio que podrás recorrer gracias al Tour San Mamés.
Una vez concluyas la visita podrás hacerte con tu artículo del Athletic Club en la tienda situada en el propio estadio, una de las cuatro que tiene el conjunto rojiblanco.
Y no lo dudes, a la hora de reponer fuerzas y comer, San Mamés es también la apuesta ideal. El estadio cuenta con San Mames Jatetxea, un restaurante con el que podrás deleitarte con la gastronomía bizkaina en un marco incomparable; La Campa de los Ingleses, un restaurante bar con menú del día y de fin de semana; y Geuria!, el sports bar de San Mamés con un buen número de platos para picar, ensaladas, hamburguesas, bocadillos, sándwiches…
¡Este otoño, no lo dudes, visita Bilbao!